Este es el Taller de cerámica de Hanny, aqui ella y su socia dan cursos y venden las maravillas que hacen.
1 comentario:
Anónimo
dijo...
Querida Mayita.´
En la primera de estas fotos tu carita está muy aflijida. Muchas veces he advertido esta expresión en tu rostro. Yo investigaría las causas, porque, naturalmente, tú no sabes decir con pálabras qué pudiera estar pasando por tu mente, ante, lo que no tengo dudas, son los asedios cargosos de los mayores que te tratan, algunas veces, como un juguete.
Y dile a Gaba, esa amiga, que te quiere tanto de lo que no tengo dudas, que ha utilizado la palabra "sudaca" en un término que no correspondería usarla. Aquí en Europa, sobre todo los españoles, no nos llaman "sudaca", como seres inferiores que somos, nos llaman a todos los de sur, despreciativamente, los "SUDACACAS", y se sienten bien cuando ven que nosotros, sin darnos cuenta, nos hacemos cargo de ésta injuriosa palabra y su contenido lo utilizamos con el mismo valor despreciativo que ellos le dan, así no se sienten culpables de la palabra con la que nosotros, sin que nadie nos la pida, nos autodenominamos. Dile también a Gaba que un día bailaremos un bolero y yo le cantaré al oígo: "son tres palabras, solamente... // y esas palabras son: como me gustas".
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Querida Mayita.´
En la primera de estas fotos tu carita está muy aflijida. Muchas veces he advertido esta expresión en tu rostro. Yo investigaría las causas, porque, naturalmente, tú no sabes decir con pálabras qué pudiera estar pasando por tu mente, ante, lo que no tengo dudas, son los asedios cargosos de los mayores que te tratan, algunas veces, como un juguete.
Y dile a Gaba, esa amiga, que te quiere tanto de lo que no tengo dudas, que ha utilizado la palabra "sudaca" en un término que no correspondería usarla.
Aquí en Europa, sobre todo los españoles, no nos llaman "sudaca", como seres inferiores que somos, nos llaman a todos los de sur, despreciativamente, los "SUDACACAS", y se sienten bien cuando ven que nosotros, sin darnos cuenta, nos hacemos cargo de ésta injuriosa palabra y su contenido lo utilizamos con el mismo valor despreciativo que ellos le dan, así no se sienten culpables de la palabra con la que nosotros, sin que nadie nos la pida, nos autodenominamos.
Dile también a Gaba que un día bailaremos un bolero y yo le cantaré al oígo: "son tres palabras, solamente... // y esas palabras son: como me gustas".
El Tata y los berlineses.
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